viernes, 5 de agosto de 2011

Día 1. 27 horas de viaje.

Según el cronómetro de Raúl, estuvimos 27 horas viajando de puerta a puerta. Es decir, desde que nos recogió el taxi en casa, hasta que llegamos al hotel en Salt Lake City. Un ratillo vaya.
Dos cosas que me olvidé reseñar en los preparativos. Una que mucha información la saque de la web www.losviajeros.com. En esta web, encontráis fotos, diarios, foros e información de cualquier destino. Es muy útil y seguro que será vuestra web de referencia para vuestro próximo viaje, si no la conocíais ya claro. Y la segunda , es que compré varias guías que me sirvieron también para el viaje. Una para la parte de carretera y de parques naturales, y que fue la más útil: Parques del oeste de EEUU de Trotamundos. Un diez para esta guía; y otras dos para San Francisco : Plano guía de San Francisco y Top 10 San Francisco de El País Aguilar. La primera bastante útil por sus mapas detallados, la segunda regular, me sirvieron más las experiencias de otros viajeros del foro que la guía en si, así que os la podéis ahorrar.
Bueno, como os decía, el primer día de viaje, iba a ser básicamente un día de aeropuertos. Salíamos de Málaga a las 06:55 h, así que el taxi nos recogió a las 5 de la mañana, o un poco antes. Hacíamos dos transbordos, uno Madrid y otro en Chicago, para llegar finalmente a la ciudad del Lago Salado sobre las 21:50 hora local. Las maletas las facturamos en Málaga y llegaban directas a Salt Lake, bueno realmente en Chicago, las recogíamos de una cinta para pasarla a la de al lado. Había que reconocerlas pero nada de volver a facturarlas ni nada. Llegamos a Madrid a la hora prevista, sin retrasos, a las 8:00h. Salimos de Madrid con destino Chicago a las 11:55 h. El vuelo tenía una duración de 9 horas y 20 minutos, y llegaríamos a Chicago a las 14:15 hora local. Todo perfecto. Un largo viaje que entre las películas que te ponen, la lectura que te lleves y que te ponen de comer un par de veces, al final, no es para tanto. Teníamos que esperar otras horitas en el aeropuerto de Chicago, ya que el último vuelo que nos dejaba en Salt Lake salía a las 19:35h. Nos compramos algo en un Starbucks del aeropuerto y nos hicimos las primeras fotos del viaje.

Como nos aburríamos nos dimos una vuelta por las tiendas del aeropuerto y nos compramos un paquete de palomitas que eran super grasientas pero estaban buenísimas, eran de mantequilla y caramelo. Entre los 4 no fuimos capaces de comernos el paquete entero.

Bueno, creíamos que nos quedaba muy poco pero el último vuelo iba a ser el peor. Nos llevaba la compañía American Eagles, una filial de American Airlines, como aquí Air Nostrum de Iberia. Eran un avión muy pequeñito y 3 horas y media de vuelo. Fueron las peores horas de todo el viaje, hacía un frío impresionante en el avión y no tenían mantas, además los asientos eran incomodísimos, de estos de cuero que se te quedan pegados. A todo esto le sumas las más de 20 horas que llevábamos desde que salimos de casa, pues parecía que nunca llegábamos.
Aquí podéis observar los esfuerzos por intentar coger un postura cómoda para dormir pero era imposible:

Menos mal que salió en hora y llegamos en hora, recogimos nuestro equipaje y fuimos a recoger nuestro coche en la oficina de Alamo. Nos dieron, como os comenté en la entrada anterior, un Hyunday Santa Fe. Y pusimos la dirección de nuestro hotel en las proximidades del aeropuerto de Salt Lake. Era Salt Lake Confort Suite Airport. Dimos un par de vueltas mientras que nos enterábamos como funcionaba el GPS y al final, lo encontramos. Llegaríamos cerca de las 12 de la noche. Nos dieron una habitación muy grande. tenía 3 camas dobles, una de ellas independiente en una habitación. La habitación perfecta, limpia y amplia. Anda os pongo unas fotillos que se que estáis locos por verlas!!!!



Ya estábamos en EEUU!!!! pero teniamos de dormir, había sido un día muy duro de viaje, y al día siguiente, teníamos que conducir hasta Yellowstone más de 500 km. Pusimos el despertador a las 07:30 de la mañana, porque el desayuno era hasta las 09:00, y a dormir.

1 comentario:

  1. Muchas gracias también a Nuria y Álvaro por regalarnos la primera guía de la ruta 66, componentes también del equipo Valentreè junto con Rocío y Jouniss. Un besazo a los cuatro.

    Elena

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